Carmen Pérez, alcaldesa: «Santa Cruz de Bezana comienza a poner orden en el urbanismo”

“Este equipo de gobierno está poniendo orden en el urbanismo de Santa Cruz de Bezana,
tantos años desatendido por la inacción de nuestros antecesores, con medidas que
aprobamos que permiten regular y equiparar la altura de edificabilidad en dos sectores de
Mompía y Soto de la Marina y reajustar los límites territoriales con Piélagos para asentar
uno de los cimientos de un Plan General que tenemos que adecuar a la realidad actual”.
Así lo anunció la alcaldesa, Carmen Pérez, durante el Pleno ordinario celebrado este
miércoles, en relación a la suspensión de licencias para limitar a futuro la altura de
edificabilidad en tres sectores de Mompía y Soto de la Marina aún no desarrollados y a la
propuesta de reajuste de deslinde entre Santa Cruz de Bezana y Piélagos abordadas por
Pleno. Medidas que, junto a la aprobación definitiva de la expropiación de suelo para la
construcción de un nuevo depósito de agua en la Arnía y la declaración de interés público
de la infraestructura verde que unirá el molino del Ronzón con el IES La Marina, “se
enfocan a mejorar la calidad de vida de los vecinos con un crecimiento urbanístico
proporcional”.

La suspensión durante un año de las licencias en dos sectores no desarrollados, uno en
Mompía y otro en Soto de la Marina, como paso previo a la modificación de las Normas
Subsidiarias por las que se pretende reducir la edificabilidad de 6 a 3 alturas, contaron en
ambos casos con el visto bueno de PP y Vox y las abstenciones del PSOE, PRC y ADVI.
Respecto a la mies de Mompía, la regidora explicó que la previsión de crecimiento pasará
de 638 a unas 500 viviendas y que, en Soto de la Marina, de 590 a 400, con lo que se
“evitará la masificación edificatoria que saturaría servicios y dañaría la convivencia
vecinal”.
“Es una medida necesaria, responsable y pensada desde el punto de vista del interés
general”, valoró Pérez, que puso de manifiesto que con ello se podrá equilibrar “de una
manera razonable el desarrollo urbanístico de la zona, donde el límite de la altura de las
construcciones se sitúa en ese tope de tres alturas”.

“Lo que buscamos es garantizar la calidad de vida de los vecinos con una expansión
urbanística sostenida, no desproporcionada, que tenga sintonía con el entorno”, añadió la
alcaldesa. También, en un tercer sector, en Mompía,se aprobó la modificación del cambio
de uso residencial a terciario, lo que será “clave” para el futuro de la localidad. Esta
medida contó con los votos a favor de PP y Vox y las abstenciones de PSOE, ADVI y
PRC.
En materia urbanística, salió adelante de manera provisional -con el apoyo de PP, Vox y
PSOE (ADVI y PRC se abstuvieron)- la expropiación para la obtención de suelos para la
urbanización exterior del sector 100, en Sancibrián, lo que permitirá, especificó la
alcaldesa, llevar a cabo una obra “que mejora considerablemente la vialidad en el
entorno”. Otra aprobación provisional para la expropiación de terrenos, en este caso para
mejorar la accesibilidad y seguridad vial de la calle San Vicente, en Maoño, y con el fin
de atender “una demanda de los vecinos” salió adelante con los votos a favor de PP y Vox
y las abstenciones de PSOE, PRC y ADVI.

El Pleno también aprobó de manera definitiva, la expropiación del suelo del depósito de
la Arnía para proceder a la construcción de esta infraestructura “tan necesaria para
garantizar el abastecimiento de agua potable en un municipio en expansión como el
nuestro”, recalcó la regidora. El proyecto, con el respaldo del Gobierno de Cantabria,
cuenta ya con el informe favorable de la dirección general de Biodiversidad del Gobierno
de Cantabria.
Reajuste deslinde con Piélagos
El Pleno ordinario también sacó adelante, con los votos a favor de PP y Vox y las
abstenciones de PSOE y PRC (ADVI votó en contra), el reajuste en el deslinde entre
Piélagos y el municipio bezaniego, después de que ambos Consistorios alcanzaran un
consenso “técnico, jurídico y político” que “dará coherencia” a la delimitación territorial
y “uniformidad” a las parcelas, adecuándolas a la realidad actual.
“Hoy cerramos una herida”, enfatizó la regidora, quien puso de manifiesto que este
reajuste “parte de un acuerdo técnico y jurídico de 2017 que, por decisiones políticas y
desacuerdos entre los entonces alcaldes, socialistas en ambos casos, no se llevó a cabo”.

El reajuste, que afecta a cinco principales áreas (Boo de Piélagos-Maoño; Soto de la
Marina-Liencres; Mompía-Mortera; Mompía-Boo y Prezanes-Mortera), “dará solución a
las discrepancias técnicas y jurídicas que venían manteniendo años atrás ambos
municipios” debido a que “ambos planeamientos urbanísticos o no casaban, o se
extendían hasta donde no era necesario o, incluso, dejaban zonas fuera de clasificación”.
“Lo cierto es que hoy, este equipo, como parte del proceso previo a la posible adaptación
de nuestras normas y aprobación del Plan General, consideramos necesario retomar ese
consenso que supone poner por encima de intereses particulares el bien común”, recalcó
la regidora.

Con este acuerdo, que también deberá suscribir Piélagos, el reajuste dará a Santa Cruz de
Bezana una superficie de 26.822,1 metros cuadrados y de 26.949,3 metros cuadrados a
Piélagos.
Interés público de la infraestructura verde
El Pleno aprobó con los votos a favor de PP, Vox y PSOE -la abstención de ADVI y el
voto en contra del PRC-, la declaración de interés público del proyecto de infraestructura
verde vinculada mayoritariamente a los arroyos, desde el Molino del Ronzón, en
Sancibrián, hasta las inmediaciones del edificio municipal de RADA, finalizando en el
entorno de Tres Fuentes y el IES La Marina.
La alcaldesa explicó que dicha infraestructura tendrá conectividad medioambiental, con
usos peatonales y de estancia y esparcimiento ciudadano, y tendrá una longitud cercana a
los dos kilómetros, con una superficie de intervención de aproximadamente 150.000
metros cuadrados.

Se trata de un proyecto que se prevé en dos tramos con un carácter diferenciado que se
abordará en distintas fases. La primera de ellas, que va del Molino del Ronzón al entorno
del Edificio de Rada, discurre por un trazado de 1.100 metros y aproximadamente
125.000 metros cuadrados de superficie; atravesará un entorno de alto valor ambiental
asociado al arroyo Otero y al arroyo afluente desde Tres Fuentes, en donde se intervendrá
en su recuperación y en la creación de espacios de paseo verde y áreas de estancia con
acciones respetuosas en humedales (pasarelas elevadas) para la contemplación y disfrute.
La segunda fase irá del entorno del edificio municipal de RADA a Tres Fuentes y al IES
en Santa Cruz de Bezana, donde se construirá un tramo de infraestructura verde de una
longitud de 1.000 metros y aproximadamente 25.000 metros cuadrados de superficie. En
él se prevé la ejecución de un carril-bici-peatonal para el paseo y ocio ciudadano, y
también para la mejora de conectividad bici-peatonal teniendo en cuenta que se prevé
enlazar con la actual infraestructura de movilidad ciclista que parte del PCTCAN en
Santander hasta la avenida José María Pereda al sur del edificio de Rada. En este tramo
se prevé actuar en la recuperación ambiental en un entorno con un cauce prácticamente
de escorrentía en el que se requiere una intervención de revegetación y regeneración
ambiental.